Reseña / Una novela que soñaba con ser ensayo ["La conjura contra Porky" de Fernando Vallejo] / Enrique Sebastián García Perales

Una novela que soñaba con ser ensayo
["La conjura contra Porky" de Fernando Vallejo]


+ Enrique Sebastián García Perales
Colaboración de Enrique Sebastián García Perales quien participó en nuestra convocatoria para el envío de textos a ser publicados en este espacio. Reseña crítica de la última novela del polémico escritor colombiano Fernando Vallejo «La conjura contra Porky». [Si deseas enviar alguna colaboración para que aparezca en este espacio, acá las bases: Convocatoria].

El silencio se vuelve un hábito cuando el hombre y la vida no tienen ya nada que decirse. A sus ochenta años, una edad en que la mayoría de las personas han agotado todas sus palabras, Fernando Vallejo ofrece una novela donde el ruido parece ser el principal atributo. En La conjura contra Porky (Alfaguara, 2023), la pluma del escritor colombiano es una manguera de fuego que alimenta las ideas más incendiarias de la actualidad. No perdona nada ni a nadie, pues para él nada ni nadie merece ser perdonado. Exabrupto de ciento cuarenta páginas, el libro de Vallejo se da a la tarea de nombrar todo aquello que en la realidad a veces parece innombrable. La lectura, sin embargo, parece ser un laberinto que cambia de forma con cada paso que da el lector, pues alterna no sólo de estilo, sino de género. ¿Ensayo, pasquín o noveleta? La conjura contra Porky es una cruza de las tres. La insistencia del autor por hacerse oír a cualquier precio hace que todos se tapen los oídos.

El relato arranca con la muerte del protagonista y narrador, el propio Vallejo, quien se ha suicidado frente a la Basílica Metropolitana de Medellín. Con una soltura de palabras que, irónicamente, sólo apareció después de guardar silencio para siempre, empieza a narrar cómo los curiosos antes que las moscas se reunieron en torno a su cadáver para comentar el hecho. En los rostros de la gente, en su vestimenta, en sus opiniones y en sus prejuicios, Vallejo halla las mismas razones que lo condujeron al suicidio, como si los vivos fueran la excusa perfecta para dejar de vivir. La crítica social, que por momentos se anunciaba como un resurgimiento de los mejores pasajes de La virgen de los sicarios (Alfaguara, 1994) decepciona rápidamente al convertirse en una suerte de tiro al blanco donde cualquier lugar es la diana. Greta Thunberg, Jesucristo, Vladímir Putin, Isaac Newton, Tomás de Aquino, Bill Gates, Santa Teresa, Joe Biden, Juan Pablo II, Albert Einstein, Adán y Eva, Charles Darwin, Raúl Castro y Donald Trump, entre otros, son receptores (y merecedores) de los insultos que Vallejo les confecciona como un traje hecho a la medida en párrafos largos y tediosos. Es ahí donde la novela se pierde por los caminos del ensayo y termina, sin saber realmente cómo, en el pasquín. El relato propiamente novelesco cabe en la mitad de páginas que conforman el grosor de La conjura contra Porky, pues además de atacar a figuras públicas, se dedican muchas páginas a ridiculizar la Física, la Biología, la Teología y la Política. El estilo cargado de pesimismo mordaz que volvió célebre al autor de El desbarrancadero (Alfaguara, 2001) se reduce aquí a la injuria fácil y gratuita. Los únicos que salen bien parados son los animales, causa de lucha para Vallejo en la vida real, y las canciones de Cuco Sánchez, depositarias de toda esa melancolía que no supo plasmar en su libro.

Un aspecto curioso de la obra es cómo su autor resuelve el dilema de las críticas negativas, adelantando su respuesta a ellas en el relato mismo, como si fuese un criminal que limpiara la escena de su crimen antes de cometerlo. Se ha dicho que Vallejo recicla sus temas y no ofrece nada novedoso al público, pero acaso se repite porque la historia humana se repite, como si ambos, escritor y acontecimientos, ya no tuvieran otro tema de conversación que el olvido (y el olvido del olvido). Lo innegable es que el ganador del Rómulo Gallegos 2003 escribe a la par que se dan los hechos en el mundo, por lo que su texto resulta tan actual como el periódico de la semana pasada. Otra peculiaridad de la obra es su tono profético, pues en el universo de La conjura contra Porky la vida humana llega a su fin unas semanas después del suicidio de Vallejo a causa de una guerra nuclear. El propio narrador, desde la muerte, explica en su desencanto por qué el hongo atómico era

una conclusión apropiada para el hombre: como nada sirve, todo debe desecharse. Igualmente, ridiculizar la religión valiéndose de metáforas desproporcionadamente absurdas es una de las características esenciales de Vallejo que se mantienen a lo largo de la novela. Para él, la resurrección de Lázaro por Cristo es análogo a los efectos del Viagra en el pene, así como el amparo que buscan los hombres en la Virgen no es diferente a la protección que se busca en un guardaespaldas con metralleta. Finalmente, los representantes de la tecnología moderna escogidos para cargar con todo el rechazo de Vallejo son Alexa, Siri y TikTok.

La conjura contra Porky es un ensayo que tuvo la mala fortuna de nacer como novela. No deja de extrañar que Fernando Vallejo se inclinara por este género a sabiendas de todos los temas que pensaba tratar, pues en La puta de Babilonia (Planeta, 2007) ya había encontrado la manera de aterrizar un ensayo serio en su prosa característica. Habría resultado más atrayente darle a sus ideas la forma que merecían, conocer su perspectiva de la realidad sin los estorbos de la ficción. El punto que salva al libro de naufragar irremediablemente en su propia tormenta de palabras reside en cómo analiza sucesos que ni siquiera los historiadores han tenido tiempo de analizar. Vallejo, como escritor, demuestra cómo la literatura se adelanta a la historia en muchos aspectos. Tristemente, y en esto podemos compartir el pesimismo del colombiano, la historia reciente se ha escrito más con sangre que con tinta.

 

_________

– Vallejo, Fernando. La conjura contra Porky. Colombia: Alfaguara, 2023, 139 pp

Enrique Sebastián García Perales. Estudia Historia en el Instituto Mora. Becario en los años 2022 y 2023 de la Fundación para las Letras Mexicanas para el Curso de Creación Literaria en Xalapa. Ganador de una Mención Honorífica en el concurso de mini ficciones «Voz del Narrador 2022» por Soledad. Ha colaborado con Senderos Filológicos del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, La Palabra y el Hombre de la Universidad Veracruzana y la Revista ORBEM de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM.